El benchmarking es un proceso orientado a la optimización de la evaluación de una empresa u organización, una vez analizados los procesos, los procedimientos y las estrategias que la caracterizan. Mediante esta técnica se identifican, comparan y aprenden de los mejores productos, servicios y prácticas que existan, para configurar un programa para el cambio y promover una cultura de mejora continua dentro de una organización.
Para que el benchmarking funcione adecuadamente es fundamental que las organizaciones que lo apliquen deban aprender a hacerlo, a elegir el momento más adecuado para ponerlo en marcha, a contar con el apoyo decidido de la dirección y a compartir la información mediante el desarrollo de las infraestructuras necesarias.
La utilización del Benchmarking en la gestión del dolor se debe de considerar una herramienta de mejora continua en una organización que de manera permanente busca mejorar el tratamiento del dolor al permitir: 1) aumentar la probabilidad de satisfacer las necesidades de los clientes, de manera correcta y desde el principio; 2) garantizar que las mejores prácticas se incorporen a los procesos de trabajo; y 3) calibrar la verdadera productividad, establecer metas con base en hechos, y volverse más competitivos